PUERTO PLATA.– Profunda consternación ha provocado en esta provincia el fallecimiento de la joven Johanna Santos, quien se desempeñaba como colaboradora del Banco Popular Dominicano, hecho que ha generado un amplio sentimiento de pesar entre familiares, amigos y compañeros de labores.
La noticia de su muerte ha causado gran impacto en distintos sectores de la sociedad puertoplateña, donde Johanna era apreciada por su trato afable, profesionalismo y calidad humana, cualidades que le ganaron el respeto y cariño de quienes tuvieron la oportunidad de conocerla.
A través de un comunicado, el Grupo Puerto Plata expresó su solidaridad y profundo pesar ante tan irreparable pérdida, uniéndose al dolor que embarga a sus familiares y allegados, al tiempo que elevó oraciones para que Dios les conceda fortaleza, resignación y consuelo en este difícil momento.
En redes sociales, múltiples mensajes de condolencias han sido compartidos, reflejando el impacto que deja su partida y el vacío que produce entre quienes compartieron con ella en el ámbito personal y laboral.
Contexto y llamado de atención
En el transcurso de este año, en distintas provincias del país, han primado notas luctuosas que reportan fallecimientos repentinos por infarto, afectando a personas de diversas edades. Apenas hace tres días, se informó la muerte de una digitadora de banca de loterías, de 20 años de edad, quien sufrió un infarto mientras se encontraba laborando, hecho que volvió a estremecer a la opinión pública.
Este medio ha reiterado el llamado a las autoridades de Salud Pública para que se activen alertas preventivas, campañas de orientación y protocolos de educación ciudadana. Sin embargo, la institución llamada a asesorar al público en favor de la salud colectiva continúa siendo percibida como ornamental por amplios sectores, ante la ausencia de acciones visibles y sostenidas.
En medio de la incertidumbre, cobra fuerza en la opinión pública la hipótesis de la “V”, mientras que, a juicio de observadores, tampoco la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha salido al frente con una campaña preventiva clara y accesible para la población.
Ante este panorama, diversos ciudadanos y comunicadores coinciden en que cada persona debe asumir medidas preventivas, sin esperar ser sorprendida por un evento cardíaco. Entre las recomendaciones que circulan están la revisión médica periódica, cambios responsables en la alimentación, reducción del estrés y la búsqueda de información alternativa, incluyendo material naturista orientado —según sus promotores— a la eliminación de metales pesados y a la mejora del bienestar general.
Nota : Por Frank Sánchez
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