El mundo de la moda despide a uno de sus más grandes creadores. Giorgio Armani, el legendario diseñador italiano conocido como el “Rey Giorgio”, falleció a los 91 años de edad en Milán, dejando tras de sí una herencia que marcó la historia del estilo contemporáneo.
El Grupo Armani confirmó la noticia con un comunicado cargado de emoción, en el que se refirió al modista como su “creador, fundador y motor incansable”. Según la nota, Armani murió en paz, rodeado de sus seres queridos, “después de haber trabajado hasta sus últimos días”.
Los últimos meses
Semanas antes de su cumpleaños, el diseñador sufrió una infección pulmonar que lo obligó a ingresar en el hospital y posteriormente a guardar reposo en su villa milanesa. Por esa razón se ausentó de un desfile masculino de alta costura de su firma en junio, algo inusual en él, pues era conocido por no abandonar nunca sus talleres.
Una vida dedicada a la moda
Nacido el 11 de julio de 1934 en Piacenza, al norte de Italia, Armani no se encaminó de inmediato al mundo de la moda. Estudió medicina en la Universidad de Milán, aunque abandonó la carrera para trabajar primero como escaparatista en unos grandes almacenes y luego como diseñador en la casa Nino Cerruti.
En 1975 fundó junto a Sergio Galeotti la firma Armani, que rápidamente se expandió más allá de la ropa masculina para abarcar la moda femenina, accesorios, cosmética, decoración e incluso la hotelería y la gastronomía.
Su gran salto internacional llegó en los años ochenta, cuando vistió a Richard Gere en la película American Gigolo (1980). Desde entonces, Armani se convirtió en referencia de Hollywood y de las alfombras rojas, vistiendo a estrellas, deportistas y personalidades políticas.
El sello del 'Rey Giorgio'
Armani revolucionó la moda con su elegancia sobria y depurada, reinventando el traje masculino y liberando a la mujer con siluetas que combinaban comodidad y sofisticación. Fue pionero en llevar el estilo “desestructurado” a la alta costura, y en convertir la moda en un estilo de vida que trascendía la pasarela.
A lo largo de su carrera, construyó un verdadero imperio empresarial con múltiples líneas (Armani Privé, Emporio Armani, Armani Exchange, Giorgio Armani Casa, entre otras) y más de 500 tiendas en el mundo. Su patrimonio, según estimaciones de Forbes, superaba los 7.000 millones de dólares, lo que lo convirtió en uno de los diseñadores más ricos e influyentes del planeta.
Un legado inmortal
Más allá del negocio, Armani se definía como un trabajador incansable y un perfeccionista. Su visión de la moda como un lenguaje universal de libertad y elegancia permanece viva en cada colección que lleva su nombre.
Con su partida, la moda italiana pierde a uno de sus pilares históricos, pero el “Rey Giorgio” permanecerá como un ícono inmortal que transformó la manera en que el mundo viste y entiende el estilo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario