San Pedro de Macorís.– Falleció el ingeniero en radiofrecuencias Rafael L. Ballenilla, una figura histórica en la radiodifusión de Centro y Sudamérica, cuya trayectoria marcó un antes y un después en el desarrollo de importantes emisoras del continente.
La información fue ofrecida en exclusiva a Mirador Web por su hijo mayor, el maestro de taekwondo Rafelito Ballenilla, quien indicó que los restos de su padre serán expuestos este lunes en la Funeraria del Pueblo, ubicada en la avenida Independencia de esta ciudad. El sepelio está previsto para el martes. Este medio actualizará la nota una vez se confirme la hora exacta.
Aunque no se ofrecieron detalles específicos sobre la causa del deceso, se informó que el ingeniero Ballenilla enfrentaba complicaciones de salud desde hace un tiempo. Hace algunos años, este redactor escuchó que don Rafael se había trasladado a residir en un campo, en busca de mayor tranquilidad, aunque dicha información aún no ha sido confirmada por sus familiares.
El ingeniero Ballenilla tuvo una destacada participación en el lanzamiento y mantenimiento de reconocidas emisoras en Hispanoamérica, como La Voz del Trópico, Radio Televisión Dominicana, Radio Clarín, Radio Popular, entre otras.
Durante la Revolución de Abril de 1965, su emisora "La Voz del Caribe" fue atacada desde una avioneta en pleno programa en el que participaba el locutor Gregorio Justiniano (también ya fallecido). Años más tarde, Ballenilla vendió dicha emisora al radiodifusor Danilo Aguiló, quien le cambió el nombre a Radio Mar 1160 AM.
Además, Ballenilla formó parte del equipo que lanzó la histórica emisora Radio Martí, que transmitía desde Miami para el pueblo cubano, y brindó soporte técnico a estaciones de radio en Puerto Rico y Venezuela.
Por muchos años residió en la calle Zayas Bazán, en el barrio Miramar de San Pedro de Macorís, junto a Ángela Lugo, con quien procreó a su hija menor, Angelina, hoy residente en Puerto Rico. En esa misma vivienda instaló la segunda cabina de su emisora 99.3 FM, cuyo permiso exigía que la cabina principal estuviera ubicada en el municipio Consuelo.
Tiempo después de comenzar operaciones con la 99.3 FM, este redactor, Frank Sánchez, le propuso bautizar la estación con el nombre "Kiu99FM", una idea que lo entusiasmó tanto que llamó a su esposa exclamando: “Ángela, este tipo es un genio. ¡La emisora ya tiene nombre!”. También escribí el contagioso eslogan “Kiu99, la radio que te mueve” y elaboré un cuaderno lleno de promociones, que fueron grabadas por un locutor de Santo Domingo.
Posteriormente, Ballenilla vendió su casa en Miramar al empresario Héctor Luis Febles (el primo), luego de separarse de Ángela, tras muchos años de vida en común. También vendió la emisora a un empresario farmacéutico apodado "El Guardia", quien le cambió el nombre por "Cielo FM", convirtiéndola en un medio de evangelización de corte pentecostal.
En cuanto a Kiu99FM, este redactor la relanzó de forma online en bajo perfil, con la esperanza de que algún inversionista se anime a proyectarla nuevamente en frecuencia modulada (FM) y permitir que su legado se mantenga vivo por más tiempo.
Hoy lloramos la partida de un hombre al que muchos llegamos a considerar parte de nuestra familia. Su legado técnico, su pasión por la radio y su carácter afable dejan huellas imborrables en la historia de la radiodifusión dominicana.
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