Por Frank Sánchez de Miradorweb.
En una entrevista realizada por la periodista Edith Febles, el empresario Antonio Espaillat, propietario de la icónica discoteca Jet Set, rompió el silencio sobre la reciente tragedia ocurrida en su establecimiento.
Espaillat reveló que algunos clientes tenían mesas fijas reservadas desde hace más de 30 años, lo que da cuenta de la fidelidad y tradición que giraba en torno al lugar. Sobre su relación con el fallecido artista Ruby Pérez, expresó conmovido: “Perdí un gran amigo. Tenía una excelente relación con él y me solidarizo profundamente con su familia”.
En cuanto a las medidas de seguridad, explicó que contaban con seis hombres encargados de esa labor y aseguró que no solían registrarse trifulcas dentro del local. Al ser consultado sobre qué debe cambiar para evitar tragedias similares, reflexionó: “Debe haber un despertar. Tenemos que estar más atentos a cosas que muchas veces pasamos por alto”.
Uno de los puntos más comentados ha sido el estado del techo. Al respecto, Espaillat explicó que desde la fundación del lugar, hace 30 años, el techo fue de plafón de yeso .
Esto último hará que los críticos arremetan contra él y también ponen en tapete la mala costumbre de algunos empresarios que por ahorrarse dinero y no pagar a especialistas en cada oficio ,prefieren improvisar usando a empleados no capacitados en la materia a los que no les pagan por labor adicional a la que son contratados .
Antonio Espaillat cuenta que se enteró del desplome del Jet Set por llamada de su hermana desde los escombros
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